La Optimización Empresarial con la Arquitectura Corporativa

Desde su creación, la arquitectura ha tratado siempre de representar estructuralmente la imagen de la sociedad a través de sus edificaciones y estilo de urbanismo, ya que no solo se trata de crear edificios que puedan ser habitables, sino también de representar la calidad de vida social de sus habitantes. Eso mismo pasa cuando la arquitectura se une al mundo corporativo, al tratar de implementar la identidad corporativa a las edificaciones empresariales es cuando se crea la Arquitectura Corporativa, y aunque creas que puede o no ser importante te invitamos a echarle un vistazo a este post y sacar tus propias conclusiones sobre ella.

La arquitectura ha sido una herramienta que forma parte de la sociedad, y como tal, es un elemento de comunicación persuasiva e informativa que cumple un considerable rol respecto a la transmisión de mensajes de distintas índoles y los edificios siempre han formado parte de la imagen de una sociedad, entonces ¿qué pasa cuando la arquitectura quiere representar la identidad corporativa de una empresa?

Cuando hablamos de identidad corporativa, estamos haciendo referencia a la representación física de una marca. Hasta ahora, este concepto atendía a cuestiones como el logotipo y los colores de la marca, la forma de comunicar o los valores que la empresa quería representar. Cuestiones que se desarrollaban con el trabajo diario y que ahora atienden también a las sedes principales de las empresas.

La arquitectura corporativa, la gran innovación empresarial:

Al hablar de arquitectura corporativa nos estamos refiriendo a la rama arquitectónica encargada del diseño y construcción de los espacios que van a constituir las sedes y oficinas de las marcas, este nivel pocas empresas llegan a plasmarlo o edificarlo, porque consiste en personalizar el edificio que forma la empresa para que transmita sus valores principales, lo que es la marca y porque esta existe, y muchas empresas no profundizan tanto ese aspecto de su marca. La arquitectura corporativa fortalece la imagen total de la empresa. Los edificios nos comunican información sobre la estructura interna o la grandeza de una organización

Buenos ejemplos de esto son empresas como Google o Apple, quien no conoce los famosos, excéntricos y fuera de lo común oficinas y sedes de estas 2 grandes empresas, que pareciera que se dedicaran a relajarse y divertirse en vez de trabajar, pero no, estos espacios son especialmente creados para incentivar la motivación y despejar el estrés del trabajo, pura arquitectura corporativa.

Los rasgos de identidad visual de la empresa deben ser aplicados en el diseño exterior e interior de las instalaciones corporativas. Esto facilita la fijación permanente de esa imagen en la mente del público, permitiendo diferenciar a primera vista la identidad de una empresa, sea cual sea.

Aunque generalmente de eso se encarga el diseño de interiores, para una empresa la arquitectura corporativa también puede abarcar la arquitectura de las oficinas de las sede, dependiendo de la capacidad del arquitecto realizando el proyecto.

¿Por qué apostar por la Arquitectura Corporativa?

Es conveniente entonces, destacar que la arquitectura corporativa tanto desde afuera como de adentro deben expresar la identidad y el espíritu de la marca, a fin de constatar integralmente como un canal y mensaje, que en sí misma, transmite los valores de la organización; y la resultante, es la expresividad propia de la empresa, reflejada en la estética de sus espacios y sus fachadas que operan como un factor diferenciador, al estar cuidadosamente diseñados de acuerdo con los principios de la compañía.

En conclusión La arquitectura corporativa no se debe entender como el simple lugar donde se realiza un trabajo. La arquitectura está comunicando al público que accede a ella y a los empleados datos sobre nuestra identidad corporativa. Un edificio en sí o su ubicación pueden transmitir prestigio y reforzar la lealtad de la plantilla o bien reflejar mediocridad.

Efectivamente, la cultura corporativa se manifiesta físicamente en la identidad corporativa y está, a su vez, lo hace normalmente a través de elementos como el logotipo, la tipografía y la paleta de colores utilizada en su comunicación. No cabe duda de que las instalaciones físicas de la empresa, oficinas, locales comerciales y fábricas, pueden constituir un poderoso soporte de la identidad corporativa.

 

Las grandes marcas llegan a serlo porque ponen un especial empeño en cuidar todos y cada uno de los detalles que atañen a su marca. Y la arquitectura corporativa es una nueva forma de expresión que poco a poco las empresas están sabiendo integrar en sus sedes, creando edificios realmente increíbles de ver y que no se van de tu memoria. 

Cada vez más, las corporaciones y grandes empresas, apuestan por la arquitectura empresarial para transmitir los valores centrales de ellas y elevar el prestigio y motivación tanto de la empresa, sus empleados como de sus consumidores, es por esto que la arquitectura corporativa se ha ido ganando poco a poco un espacio en los primeros puestos en las prioridades de las empresas.